La procesión del Viernes Santo tuvo que ser suspendida por la presencia de lluvia momentos antes de la hora de inicio. Una reunión de urgencia entre las cofradías fue la que decidió que finalmente se optara por no salir a procesionar.
La procesión del Viernes Santo tuvo que ser suspendida por la presencia de lluvia momentos antes de la hora de inicio. Una reunión de urgencia entre las cofradías fue la que decidió que finalmente se optara por no salir a procesionar.